la prensa alemana explica por qué
La historia de Charlene de Mónaco es, cuanto menos, peculiar. Criada en el seno de una familia de clase media baja de origen alemán que se trasladó a Sudáfrica, la joven eligió una carrera profesional en el deporte, más concretamente en la natación. La ahora princesa formó parte del equipo de relevos de Sudáfrica en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 y también participó en varios torneos, como el Campeonato Mundial de Natación en Piscina Corta.
Precisamente en una de estas competiciones la joven, de apenas 22 años, conoció al príncipe Alberto, más concretamente en el campeonato de natación Mare Nostrum de Montecarlo en el año 2000. “No sé si entonces nos enamoramos”, Alberto confesó. Hace unos meses, en una entrevista con la revista 'Paris Match'. “Después de eso, no volví a ver a Charlene durante varios años. […]. En primer lugar, me pareció una excelente nadadora y una persona amable, sonriente y accesible. Nos divertimos mucho”, continuó.
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No fue hasta 2006 que se les vio juntos en público por primera vez en la ceremonia de los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín 2006, y apenas 4 años después se anunció su compromiso. En 2011 se celebró la gran boda con la que ambos sellaron su amor, garantizaron el futuro del Principado y, de paso, silenciaron los rumores y polémicas que rodeaban a Alberto desde hacía tiempo.
Charlene de Mónaco, saturada de obligaciones públicas
Sin embargo, lo que iba a ser un cuento de hadas aparentemente se ha convertido en una pesadilla. Antes de la boda, se supo que la nadadora había intentado escapar de este compromiso al descubrir al tercer hijo ilegítimo de su prometido. Desde entonces, la falta de conexión aparente entre el matrimonio ha sido un tema recurrente, al igual que la tristeza que demostró la joven en todas sus apariciones.
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Todo esto explotó en 2021. Como parte de sus funciones, Charlene viajó a Sudáfrica para participar en un proyecto medioambiental sobre rinocerontes. Sin embargo, una enfermedad infecciosa obligó a la princesa a permanecer en el país más tiempo del recomendado. Un cambio que hizo que su cuñada, Carolina do Monaco, asumiera más responsabilidades. Cuando logró regresar, la joven anunció que estuvo ausente de los compromisos reales por un tiempo debido a “agotamiento emocional y físico”. Así, la madre de Jacques y Gabriella se distanció de los focos mediáticos para recuperarse.
La última aparición de Charlene de Mónaco causa sensación
Poco a poco, a medida que se sentía preparada, Charlene de Mónaco empezó a presentarse en diferentes eventos. Al principio, la mayoría eran eventos importantes para la Casa Real de Mónaco. Pero, poco a poco, la princesa se fue adaptando cada vez más a sus otros compromisos. Y fue precisamente en uno de estos últimos eventos cuando se desató la euforia entre sus seguidores. ¿La razón? La prensa alemana lo reveló.
“Esto ya no se puede olvidar: la bella esposa de Alberto de Mónaco parece cambiar más de una fecha a otra. Su apariencia, su comportamiento: la princesa Charlène de Mónaco ha perfeccionado todo esto en los últimos años y ahora lo ha vuelto a llevar al límite”, comenzó el portal 'Bunte'. Para este medio, la princesa presentó un cambio de actitud y de estilo eso denota que es “más fuerte, más tranquila consigo misma e irradia pura confianza en sí misma, especialmente en los encuentros en solitario”.
Principalmente, fue su nuevo peinado lo que destacó esta transformación. “La melena cortada a navaja que lucía con orgullo la esposa de Alberto de Mónaco es cosa del pasado. El cabello de Charlene vuelve a ser significativamente más largo. Ahora, hasta que la esposa del Príncipe Alberto de Mónaco pueda atarlo al cuello”, describieron. Esto se puede ver en las fotografías de su última aparición durante la ceremonia de apertura del Encuentro Europeo de Natación de Olimpiadas Especiales en Mónaco.
Esta teoría de la prensa alemana parece corroborada por los comentarios que la esposa del príncipe Alberto recibe en las redes sociales por parte de fans que han notado este cambio. “La princesa Charlene es amigable y elegante sin esfuerzo”, elogia un seguidor, mientras otro garantiza que es “una mujer extremadamente empática, una dama con un gran corazón. Maravilloso en todos los sentidos.” De esta manera, la evolución interna de Charlene comenzó a evidenciarse en el exterior también a través de sonrisas, elegancia y paz.
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