Antes y después de David Hasselhoff: Lo que sucedió después del éxito de los años 80 con el “auto fantástico”

Fantástica serie Auto (Knight Rider), transmitida entre 1982 y 1986, se convirtió en un verdadero ícono de televisión de los 80. “Estoy orgulloso de saber cómo sintonizar lo que los espectadores querían ver y, desde allí, crear historias y productos de alta calidad”, dijo Larson en una entrevista.
David Hasselhoff, quien interpretó a Michael Knight, se convirtió en un símbolo de televisión de los 80 gracias a su carisma y al gran éxito del fantástico auto. Su rostro es sinónimo de ese tiempo, y a pesar del hecho de que al principio no fue considerado un actor prestigioso, la serie le dio el impulso necesario para convertirse en una estrella del mundo. Con los años, su figura ha pasado de una acción galante a una leyenda de la cultura pop, un camino que continuó su participación en Baywatch, otra serie que, lanzada en 1989, consolidó aún más su popularidad.
Hasselhoff comenzó su carrera en cine y televisión a fines de la década de 1970, participando en varias series y películas, pero fue su papel como Michael Knight, un policía cuya vida cambia dramáticamente después de ser rescatado por la Fundación para la Ley y el Orden, que lo catapultó a la estrella. Después de una emboscada que lo dejó desfigurado, su personaje simula su muerte y adopta una nueva identidad, convirtiéndose en el galante de los 80 con un Pontiac Firebird modificado que le da el nombre de Kitt. La serie rápidamente se convirtió en un éxito y Hasselhoff en un símbolo de televisión de la época.
En cuanto a su carrera actual, aunque Hasselhoff ha enfrentado altibajos a lo largo de las décadas, sigue siendo una figura actual en la cultura popular. Participó en producciones de bajo costo como Knight Rider 2000, e hizo apariciones especiales en películas como The Guardians of Vol.
La historia del fantástico auto nació de la mente creativa de Glen Larson, quien, a pesar de ser un guionista respetado, ha visto sus ideas rechazadas en muchas ocasiones. En ese momento, la premisa de un automóvil que hablaba con su conductor parecía un disfraz difícil de aceptar. Los ejecutivos de NBC se rieron de la idea, ya que recordaban fallas pasadas ya que mi madre es un automóvil, una comedia de los 60 considerada una de las peores de la historia. Sin embargo, Larson persistió y logró convencer al canal, ofreciéndose para reducir su salario y aceptar el 50% de las ganancias por los derechos de los productos derivados. Esta apuesta, que inicialmente puso en riesgo su carrera, resultó en un éxito rotundo.
El auto Kitt, con su diseño futurista, se convirtió en otro personaje de la serie. Su apariencia y tecnología han sido tan avanzadas por su tiempo que muchos de los conceptos que representó parecen premoniciones de lo que se considera tecnologías de vanguardia hoy en día. Equipado con inteligencia artificial, Kitt pudo conducir de forma autónoma, interactuar con su conductor a través de comandos de voz y realizar tareas como asistente virtual. “La voz de Kitt, hecha por William Daniels, era un componente esencial para crear una conexión emocional con la audiencia”, dijo Joe Huth en su libro Knight Rider: 30 años de una cruz y su auto parlante.
Además de la trama y los personajes, el fantástico auto también lanzó las bases para una nueva forma de hacer marketing televisivo. Larson, consciente de la popularidad del automóvil, ha firmado un acuerdo con General Motors para promover Pontiac Firebird, un modelo que se utilizó como base para Kitt. Cada vehículo fue comprado por un dólar, lo que permitió que las escenas con el automóvil sean accesibles sin romper el presupuesto. Además, la serie fue pionera en la creación de productos derivados como juguetes, ropa y accesorios, que generaron grandes ganancias. Como se calculó, Larson ganó $ 100 millones en el primer año solo por regalías de estos productos.
Lo más sorprendente es cuántas de las tecnologías que el fantástico automóvil anticipó en la década de 1980 es ahora una realidad. El vehículo de dirección autónoma, el reconocimiento de voz y la inteligencia artificial que ha aprendido y adaptado son conceptos que ya no parecen premoniciones. Actualmente, compañías como Tesla y Waymo están liderando el desarrollo de vehículos autónomos y las principales marcas, como General Motors, trabajan para integrar tecnologías de inteligencia artificial como ChatGPT en sus vehículos.
Aunque la serie fue cancelada después de cuatro temporadas, el fantástico legado del automóvil sigue vivo. Las repeticiones y sus derivadas, como películas y videojuegos, siguen siendo populares. Con los años, ha tratado de revivir la magia de la serie en nuevas versiones, como Team Knight Rider (1997) y Knight Rider (2008), pero ninguno de ellos logró replicar el éxito del original. Sin embargo, la visión de Larson sobre la relación entre la tecnología y la humanidad, reflejada en la interacción entre Michael Knight y Kitt, sigue siendo una referencia cultural.