LA HISTORIA DETRÁS DE “NIGHTCALL” DE KAVINSKY
ORÍGENES DE KAVINSKY: DE ACTOR A MÚSICO
Kavinsky, cuyo nombre real es Vincent Belorgey, no siempre fue un productor musical conocido. Sus inicios se remontan a más de dos décadas atrás, cuando aspiraba a ser actor. En una entrevista, Kavinsky confiesa que “estaba tratando de ser actor, pero estaba realmente aburrido”. Antes de dedicarse al mundo de la música, tuvo pequeños papeles en films, incluyendo “Nonfilm”, dirigido por Quentin Dupieux, también conocido como Mr. Oizo.
Fue este director, Quentin Dupieux, quien lo inspiró a dar el salto a la música. En un momento accidental, Dupieux estaba a punto de desechar una antigua computadora Apple Mac. Kavinsky, viendo la oportunidad, le pidió que se la diera, lo que encendió su interés por la creación musical. “Durante un año estuve haciendo música de mierda. Era realmente una mierda”, recordó.
EL NACIMIENTO DE “NIGHTCALL”
La canción “Nightcall”, lanzada en 2010, es uno de los primeros grandes éxitos de Kavinsky. Sin embargo, su historia comenzó incluso antes, con la colaboración inesperada de Guy-Manuel de Homem-Christo, uno de los integrantes de Daft Punk. En una gira en 2006, fue durante un viaje en autobús cuando Guy-Manuel compartió con Kavinsky la idea de lo que eventualmente se convertiría en “Nightcall”.
La producción de la canción no se concretó hasta varios años después, cuando Kavinsky empezó a trabajar en su sonido junto a amigos de la escena musical, como Sébastien Tellier y Lovefoxxx, de Cansei de Ser Sexy.
UN ÉXITO LENTO PERO SÓLIDO
A pesar del esfuerzo y la inspiración que llevaron a la creación de “Nightcall”, la canción no tuvo un inmediato éxito. Cuando se lanzó, en 2010, no fue bien recibida. Kavinsky admite que “el éxito de ‘Nightcall’ fue accidental”. Sin embargo, todo cambiaría cuando Nicolas Winding Refn, el director de la película “Drive”, se obsesionó con la canción y decidió incluirla en la banda sonora.
“Drive”, lanzada en 2011 y protagonizada por Ryan Gosling, utilizó “Nightcall” en su escena de apertura, lo que fue crucial para el renacer de esta obra. La combinación del sonido synthwave de Kavinsky con el ambiente melancólico de la película resonó fuertemente con el público, estableciendo a “Nightcall” como un clásico moderno.
UN CLÁSICO CONTEMPORÁNEO
La popularidad de “Nightcall” ha permanecido a lo largo de los años, y fue incluso interpretada en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de París 2024, junto a artistas como Phoenix y Angèle. Esta presentación impulsó la canción a nuevas alturas, convirtiéndola en una de las más buscadas en plataformas como Shazam, mucho tiempo después de su lanzamiento inicial.
Kavinsky reflexiona sobre este viaje musical, declarando que la historia detrás de “Nightcall” es un ejemplo de cómo el arte puede tardar en ser reconocido. “Nadie la quería cuando salió en 2010”, reconoce, pero el tiempo ha demostrado que este éxito tiene un valor duradero.
REFLEXIONES FINALES
La narrativa de “Nightcall” es un recordatorio poderoso de cómo los caminos hacia el éxito a menudo son inusuales y llenos de sorpresas. Desde una computadora vieja hasta una exitosa carrera musical, Kavinsky y su icónica canción han trabajado su magia, dejando una huella en el mundo de la música.
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